Extracto:Madrid, 3 feb (.).- El sector servicios español continuó al alza al encadenar en enero su tercer mes
Madrid, 3 feb (.).- El sector servicios español continuó al alza al encadenar en enero su tercer mes de crecimiento, impulsado por el incremento de la actividad comercial y de los nuevos pedidos, algo que se explica por una cierta recuperación de la demanda, si bien persisten las preocupaciones por la elevada inflación.
El índice PMI de S&P Global, que ahora integra a IHS Markit, se situó en 52,7 puntos en enero, 1,1 más que en diciembre (51,6) y nuevamente por encima de los 50 puntos que separan el crecimiento de la contracción.
La subida experimentada entre el dato de cierre del pasado año y el del primer mes de este 2023 es la más fuerte desde julio de 2022.
El sector servicios comenzó 2023 en una nota relativamente positiva. Las expansiones de la actividad y los nuevos pedidos se mantuvieron en enero y, de hecho, se fortalecieron hasta sus máximas de seis y siete meses respectivamente, indica la economista de S&P Global Market Intelligence, Laura Denman.
El crecimiento viene motivado por una mejora general de la demanda y por la esperanza de las empresas de que las condiciones sigan mejorando durante los próximos doce meses, lo que ha llevado a un leve aumento de las plantillas en el mes de enero, cuarto mes consecutivo de crecimiento del empleo.
Según el informe de S&P Global, en enero aumentó tanto la demanda interna como la externa, dato, este segundo, reseñable, en tanto en cuanto fue la primera vez en siete meses que crecieron los pedidos procedentes de clientes del exterior.
Con todo, Denman apunta que, a pesar de fortalecerse hasta su máxima de ocho meses, el grado general de confianza se mantuvo por debajo de su promedio histórico, lo cual se explica porque la alta inflación sigue preocupando a las compañías.
Una preocupación justificada para la economista de S&P Global, ya que la inflación de los precios de venta se aceleró en enero, si bien el alza de precios de los costes se ralentizó hasta su mínima de quince meses, algo que, de cara a los próximos meses, debería también atenuar la inflación de los precios de venta.
Las empresas encuestadas achacan ese incremento de los precios de venta al alza de los costes laborales, los precios de la energía y las tarifas de los proveedores.