Extracto:Tokio, 24 abr (.).- El nuevo gobernador del Banco de Japón (BoJ), Kazuo Ueda, aseguró este lunes que
Tokio, 24 abr (.).- El nuevo gobernador del Banco de Japón (BoJ), Kazuo Ueda, aseguró este lunes que la entidad mantendrá su amplia estrategia flexibilizadora, que incluye tipos ultrabajos, debido a que la inflación no es todavía lo suficientemente fuerte en el país como para plantearse una retirada de esas medidas.
Por el momento, la tendencia de la inflación está por debajo del 2 %, así que debemos continuar con la flexibilización monetaria, dijo hoy Ueda durante una intervención en el Parlamento de Japón.
Ueda asumió el cargo a comienzos de mes y, entre este jueves y el viernes próximos, presidirá su primera reunión de la junta de política monetaria del BoJ, en la que se decidirá si el banco central nipón sigue adelante o no con su heterodoxa estrategia de estímulos en vigor desde hace una década.
Según explicó, cuando se prevea una inflación superior al 2 % en la tercera economía mundial el BoJ deberá normalizar su política de estímulos.
Aunque el índice de precios de consumo (IPC) alcanzó un 3,1 % el pasado marzo, el BoJ prevé que este indicador toque techo en los próximos meses y se ralentice hasta situarse por debajo del 2 %, el objetivo fijado por el banco central nipón, en el actual ejercicio fiscal, detalló Ueda.
Para que el BoJ se replantee su actual estrategia, las previsiones sobre la tendencia de la inflación para los próximos seis meses, un año o año y medio deben ser bastante fuertes y cercanas al 2 %, subrayó Ueda.
Al ser preguntado sobre si el BoJ contempla modificar su plan de control de la curva de rendimientos del bono estatal, respondió que esa opción dependería de la evolución de la economía, de la inflación y de otros factores.
El banco central nipón mantiene sus tipos de interés de referencia negativos y su objetivo de que los bonos a 10 años oscilen en torno al 0 %, aunque a finales del año pasado decidió conceder más margen al alza para la curva de rendimientos de estos activos, lo que fue interpretado por los mercados como un indicador de futuras subidas de tipos.
No obstante, tanto el gobernador saliente, Haruhiko Kuroda, como Ueda, han insistido en la necesidad de mantener las actuales medidas flexibilizadoras dada la situación de la economía japonesa y a pesar de la aceleración durante los últimos meses de la inflación debido sobre todo al encarecimiento global de la energía y las materias primas.
Ueda admitió en su intervención parlamentaria de este lunes que el BoJ ya ha realizado muchas estimaciones de cómo podría afectar a sus finanzas y a los mercados una normalización (de su política monetaria), aunque evitó dar detalles al respecto.