Un 3,33% por tus ahorros, y es solo el principio: esta plataforma te deja contratar depósitos y cuentas en decenas de países

El contexto para los ahorradores tradicionales no es demasiado halagüeño: el Banco Central Europeo (BCE) ha bajado los tipos ocho veces en el último año, y eso ha terminado traduciéndose en menor remuneración de cuentas y depósitos. Como consecuencia, muchos españoles han optado por inversiones más activas, en fondos indexados y productos similares, es decir, en bolsa.

No obstante, dados los bruscos vaivenes en bolsa de la primera mitad de año, muchos usuarios buscan algo más conservador, un interés a veces menor pero garantizado, y ahí es donde entran las cuentas remuneradas y los depósitos a plazo fijo, que, dicho sea de paso, son los que más han recortado sus intereses. Por eso, sorprende que una entidad siga dando nada menos que un 3,33% como hace Raisin, la principal plataforma para ahorradores en Europa. Esta ofrece acceso exclusivo a depósitos a plazo y cuentas de ahorro de bancos europeos y españoles.

Ver condiciones de Raisin

Raisin hace de intermediaria entre bancos que necesitan captar capital y ahorradores que buscan rentabilizar sus ahorros y que no ven el interés ofrecido por entidades en España lo suficientemente atractivo. En su plataforma puedes contratar productos de ahorro de más de 30 bancos (con sucursal tanto fuera como dentro de España) sin problemas, todos ellos protegidos por el fondo de garantía soberano que corresponda, que normalmente cubre hasta 100.000 euros.

Todo es online a través de su plataforma, así que solo tienes que abrir una Cuenta Raisin, sin vinculaciones ni comisiones), transferir dinero y comenzar a sacar rentabilidad. La Cuenta Bienvenida de la propia entidad te da un 3,33% por tus ahorros, aunque con sus límites, ya que solo lo hace durante los tres primeros meses. A partir de ahí, lo recomendable es mover tus fondos a los muchos productos que hay disponibles y que, en distintos plazos y formas, se van muy por encima del 2% en muchos casos.

Hay una amplia variedad de cuentas y depósitos en países como los bálticos, Suecia, Italia o España, todos europeos y con distintas particularidades, pero todos con algo en común: el beneficio se depositará en tu Cuenta Raisin, y de ahí puedes reinvertirlo o retirarlo a tu cuenta bancaria corriente.

La fiscalidad, un punto a tener en cuenta

A la hora de la Declaración de la renta, tenemos que tener en cuenta si los productos de ahorro se contratan en bancos con sucursal en España o en el extranjero. Si eliges una entidad con sucursal en España, no se requiere ningún trámite fiscal adicional: la tributación funciona igual que con cualquier otro producto que genere rentabilidad en el país. Al contrario, para las entidades fueran del país, no se retienen automáticamente los impuestos correspondientes a los beneficios de tu cuenta o depósito, es algo que debes declarar tú mismo.

Los tipos van del 19 al 30%, dependiendo de los beneficios que hayas obtenido de tu ahorro, y debes rellenar el modelo 720 en la declaración, nada complicado. Solo tienes que aclararle a Hacienda cuánto dinero has obtenido en el extranjero para que se te descuente, así como declarar si tienes más de 50.000 euros depositados fuera de España.

En el caso de bancos sin sucursal en España, Raisin te acompaña paso a paso para que puedas declarar correctamente los intereses y evitar la doble imposición. Dispones de documentación detallada, así como de un servicio de atención al cliente en español, tanto por teléfono como por escrito, para resolver cualquier duda durante el proceso.

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¿Cuál es el futuro de los tipos de interés?

El beneficio que puedas obtener en productos de ahorro conservadores va casi siempre en relación al tipo de interés fijado por el BCE: si baja, la remuneración cae; si sube, se refleja tarde o temprano en un mayor interés a tu favor.

Por ahora no parece que el Banco Central Europeo vaya a aumentar los tipos, y es que se suele usar esto para enfriar o estimular la economía a conveniencia, y con varios países europeos en recesión o en riesgo de hacerlo –sobre todo Alemania– es poco probable que se vaya a encarecer el precio del dinero, sino más bien todo lo contrario.