Extracto:Parece que Estados Unidos está a punto de sufrir algún tipo de crisis económica, según afirma el antiguo director ejecutivo de Goldman Sachs, Lloyd Blankfein.
El hombre que dirigió Goldman Sachs durante uno de los períodos más turbulentos de la historia de los mercados cree quela economía estadounidense podría estar al borde de una crisis.
Lloyd Blankfein, exCEO de Goldman Sachsque dirigió el banco durante la Gran Crisis Financiera, afirma que está atento a la posibilidad de que se produzca otro gran acontecimiento económico.
Históricamente, Estados Unidos ha sufrido “la crisis del siglo” una vez cada cuatro o cinco años, declaró Blankfein el jueves a , señalando la rápida sucesión de crisis en la década de 1990 y principios de la de 2000, como la crisis de la deuda soberana, el estallido de la burbuja de las y la crisis de las hipotecas .
3 lecciones de la burbuja de las 'puntocom' y la crisis financiera de 2008 que se aplican al inestable mercado actual
“Hay muchos riesgos del 1%, pero no es un riesgo del 1% de que ocurra algo malo”, afirmó Blankfein. “Lo que creo es que nos toca. Y no importa que no se vea de dónde viene”.
La hipótesis base de la mayoría de la gente no incluye una crisis financiera en toda regla, con las acciones en máximos históricos y la economía manteniéndose en general resistente a pesar de algunos puntos débiles.
Pero hay una pista sobre dónde podría surgir el próximo gran problema de la economía, en opinión de Blankfein: los mercados de crédito.
“Normalmente, gira en torno al apalancamiento. Y, en este momento, probablemente el crédito, y hay apalancamiento en lugares que no se ven”, señaló sobre la posibilidad de que se produzca otro gran acontecimiento en el mercado.
Estas son algunas de las señales de alerta que Blankfein afirma haber visto en el ámbito crediticio:
Los diferenciales se refieren al rendimiento pagado sobre un índice de referencia como los bonos del Tesoro. Los diferenciales “estrechos” significan que los inversores perciben menos riesgo en el mercado, mientras que los diferenciales “más amplios” indican que los inversores quieren una mayor compensación por el mayor riesgo percibido.
Al igual que las advertencias sobre la complacencia cuando el mercado bursátil alcanza máximos históricos, algunos profesionales del mercado piensan quelos diferenciales crediticios históricamente estrechos podrían ser una advertencia de que los inversores están valorando erróneamente el riesgo, dados los recientes signos de debilidad en determinados sectores y en la economía en general.
El diferencial ajustado por opciones del índice se mantuvo cerca del 2,84% la semana pasada, cerca de su mínimo histórico.
El crédito privado, que se refiere a los préstamos de inversores a empresas privadas, ha vivido un gran auge en los últimos años. Esto se debe en parte a que los préstamos corporativos privados suelen ofrecer mayores rendimientos.
Los activos gestionados en crédito privado están creciendo a un ritmo interanual del 14,5%, según los datos citados en un informe de JPMorgan Private Bank.
“Hay gente que intenta, ya sabes, aumentar un poco sus rendimientos apalancándose de formas un tanto extrañas”, afirmó Blankfein, refiriéndose posteriormente a las actividades de inversión de algunas aseguradoras que han estado muy activas en el ámbito del crédito privado.
“El apalancamiento empieza a calar. Pienso en los lugares donde se está haciendo esto”, añadió. “Si yo fuera regulador de seguros en algún momento, podría afirmar: ¿realmente valen esos activos lo que afirman que valen?”.
Aun así, Blankfein declaró que seguía siendo optimista con respecto a los mercados y la economía estadounidense en general.
Esto se debe en parte a que la Reserva Federal parece dispuesta a bajar los tipos de interés, una medida que podría impulsar aún más las acciones hacia un mercado alcista.
El entorno de inversión también parece “fenomenal”, afirmó, refiriéndose al entusiasmo que genera la inteligencia artificial y su potencial para impulsar el crecimiento en Estados Unidos.
“Tengo todos estos pensamientos pesimistas, pero sigo apostando al 100% por las acciones”, aseveró. “He vivido oleadas tecnológicas y he experimentado cosas que han cambiado el mundo. Y he vivido cosas que han cambiado nuestra suerte porque invertimos demasiado en ciertas cosas”.
La perspectiva a largo plazo de Blankfein no difiere mucho de la opinión interna del banco que solía dirigir. Recientemente,los economistas de Goldman señalaron que creen que Estados Unidos está entrando en un nuevo mercado alcista secular.En una nota, los expertos en estrategia afirmaron que veían grandes oportunidades para los inversores en áreas como la tecnología, los servicios y la fabricación, así como oportunidades de diversificación fuera de Estados Unidos.