Kraft Heinz se separa: la fusión de estos dos gigantes alimentarios supone un 'extraño' error en la carrera de Warren Buffett

Los acuerdos a los que ha llegado Warren Buffett a lo largo de su carrera lo han convertido en una leyenda, pero la ruptura de Kraft Heinz representa uno de sus pocos errores, según los seguidores cercanos al famoso inversor.

El conglomerado de Buffett, Berkshire Hathaway, se asoció con la empresa brasileña de capital privado 3G Capital para adquirir Heinzpor alrededor de 23.000 millones de dólares —unos 19.800 millones de euros al tipo de cambio actual— en 2013. Dos años más tarde, volvieron a asociarse para fusionar Heinz con Kraft en una operación por valor de 40.000 millones de dólares (34.300 millones de euros).

Buffett, un apasionado de la comida rápida, lo calificó como su “tipo de transacción” y añadió que la compañía resultante podría suministrarle “ketchup o mostaza Heinz” para acompañar sus perritos calientes Oscar Mayer, que provienen de la parte de Kraft. “Añada una Coca-Cola y disfrutará de mi comida favorita”, comentaba en su día el inversor.

Una fusión desafortunada

A Buffett, que tiene intención de jubilarse a finales de este año tras 55 años al frente de su organización, le encanta poseer marcas famosas con productos muy apreciados, puesto que pueden subir los precios para contrarrestar la inflación y los clientes fieles les ayudan a defenderse de la competencia.

Kraft y Heinz encajaban perfectamente en esa descripción, pero la asociación de Buffett con 3G Capital supuso una desviación de su estrategia habitual.

Las firmas de capital privado suelen tratar de reducir rápidamente los costes de una empresa y cambiar su gestión para aumentar su valor, de modo que puedan venderla con beneficios y utilizar ese dinero para financiar su próxima adquisición.

Por el contrario, Berkshire es conocida por ofrecer una propiedad permanente y sin intervención a las compañías que compra, tratando así de evitar la inflación en lugar de eliminarla, tal y como expuso Buffett en su carta a los accionistas de 2015.

Tras la fusión de Kraft Heinz, se llevaron a cabo despidos, reestructuraciones de la dirección, amortizaciones masivas y ventas de activos. Sus agresivos controles de costes “perjudicaron significativamente” su capacidad de innovación, tal y como indicó en su día la .

La decisión de Warren Buffett de jubilarse “sorprendió” a este analista: él predice estos cambios una vez que el inversionista se retire

La organización también llegó a un acuerdo en una investigación contable estadounidense y sufrió un prolongado descenso de sus ingresos netos en medio de los cambios en las preferencias de los consumidores.

David Kass, profesor de finanzas de la Universidad de Maryland y experto en Berkshire desde hace mucho tiempo, ha declarado a que la fusión de Kraft y Heinz fue un “extraño error” por parte de Buffett.

Kass ha señalado que Berkshire tuvo que amortizar el valor de su participación en miles de millones de euros en dos ocasiones: en 2018 y de nuevo en el segundo trimestre de este año. Este experto ha añadido que durante la última década la inversión ha obtenido un rendimiento inferior al del índice de referencia en bolsa en Estados Unidos, el S&P 500.

Este martes, Kraft Heinz anunciaba que planea dividirse en dos empresas. Una albergará a Heinz, Philadelphia y Kraft Mac & Cheese, y se centrará en salsas, untables y condimentos. La otra albergará a Oscar Mayer, Kraft Singles y Lunchables, y se dedicará a productos básicos norteamericanos.

Este medio de comunicación ha tratado de ponerse en contacto con Berkshire Hathaway y Kraft Heinz para ampliar esta información, pero de momento no ha obtenido respuesta. Sin embargo, Buffett ha reconocido a que esté “decepcionado”. El inversor ha indicado a la cadena estadounidense que, aunque en retrospectiva la fusión no fue su mejor decisión, no cree que la división de la compañía vaya a resolver sus problemas.

El “Oráculo de Omaha” ha dicho anteriormente que adquirir Kraft fue un error. En la junta de accionistas de Berkshire de 2019, afirmó que “cometió un error” y “pagó demasiado dinero” para sacar adelante dicha operación.

Antes de que se anunciase esta nueva división, las acciones de Kraft Heinz ya habían caído más de un 70% desde su valor máximo en 2017. Este martes cayeron otro 7% antes de recuperar algo de terreno durante la jornada del miércoles. El valor de mercado de la organización ha caído de más de 110.000 millones de dólares en su punto álgido a menos de 33.000 millones (94.000 y 28.000 millones de euros, respectivamente).

Con una participación del 27,5%, Berkshire es el mayor accionista de Kraft Heinz. Buffett señalaba a la que no descartaba una venta, dando a entender que haría lo mejor para Berkshire. 3G vendió el resto de su participación en 2023.

El extraño error de Buffett

Kass ha argumentado que resulta “desconcertante” y parece una “aparente admisión de fracaso” por parte de la dirección dividir Kraft y Heinz y deshacer las sinergias creadas. Este experto ha asegurado que no le queda claro cómo esto va a generar valor para los accionistas. La empresa ha adelantado que prevé tener que aportar 300 millones de dólares —258 millones de euros— en concepto de “” por la división, aunque espera poder mitigar algunos de esos inconvenientes.

John Longo, profesor de finanzas, director de inversiones y autor del libro , ha apuntado que la compra de Heinz supuso un “éxito rotundo” para Buffett, pero que el hecho de fusionarla con Kraft fue un “extraño paso en falso”.

Longo ha expresado que la fusión generó menos ahorros de lo esperado. También ha explicado que Kraft Heinz se ha tenido que enfrentar a retos como los medicamentos para adelgazar, como Ozempic, que reducen el apetito de las personas, y a varios años de inflación elevada, lo que ha empujado a algunos consumidores a cambiar a alternativas genéricas más baratas.

Alex Morris, director de TSOH Investment Research y autor de , ha afirmado que está de acuerdo con el jefe de Berkshire en que la combinación de Heinz y Kraft “no fue un gran negocio”, pero ha matizado que “separarlas no solucionará los problemas clave”.

Morris ha señalado que los retos de la compañía reflejan en gran medida las crecientes presiones del sector sobre el negocio tradicional de Kraft, puesto que los gustos de los consumidores han cambiado hacia alternativas más frescas, saludables y naturales.

Adam Mead, autor de , ha declarado a que no considera que la operación de Kraft Heinz haya sido un “gran error” por parte de Buffett.

“Han recaudado dividendos a lo largo del camino y siguen poseyendo grandes activos”, ha indicado Mead. “Simplemente no valen tanto como se pensaba inicialmente”.

Los errores de Buffett son poco frecuentes, pero él mismo los ha admitido en anteriores ocasiones.

El experto inversor ha apuntado en alguna ocasión que su compra en 1993 de Dexter Shoe, un fabricante de calzado de Maine que se derrumbó bajo la presión de las importaciones extranjeras baratas, fue su error “más espantoso” y un “desastre financiero”. Compró un “negocio sin valor” utilizando acciones de Berkshire que hoy tendrían un valor de cerca de 19.000 millones de dólares (16.300 millones de euros).